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La historia del Mothman es sin duda uno de los misterios más enigmáticos y curiosos convertidos en leyendas pero que cuenta con un lado de credibilidad derivado de las múltiples evidencias y experiencias de quienes aseguran ser testigos en primera persona de la aparición de este ser de naturaleza desconocida.

El Mothman es especial por muchas razones, pero  sus singularidades más destacadas le acercan a los terrenos limítrofes de la ufología, al coincidir sus apariciones con numerosas observaciones de OVNIS en la región, o con la variopinta presencia de otras extrañas criaturas merodeando por los alrededores, incluidas los misteriosos y acosadores hombres de negro.

Ciertamente, cuando uno analiza los archivos de los sucesos acaecidos en 1966 en Virginia Occidental, puede llegar a tener la impresión de estar inmerso en un capítulo de X file. Lo mejor será que echemos un vistazo.

Su Primera aparición

Es bastante probable que la primera observación de nuestro protagonista tuviera lugar entre 1960 y 1961, cuando una extraña figura humanoide, grisácea y alada de considerable envergadura, se dejó ver por espacio de unos segundos en medio de la solitaria Ruta 2 de Cornstalk en Virginia, ante los atónitos ojos de una mujer y su padre que nerviosos y con miedo optaron por pisar el acelerador y olvidar el asunto. Tan sólo lo recordarían años después, cuando a mediados de noviembre de 1966 comenzó a correr como la pólvora un relato sorprendente, según el cual cuatro vecinos de Point Pleasant habían podido observar una criatura bastante similar a la que fugazmente se dejo ver ante los primeros y anónimos testigos. Los protagonistas de tan singular historia fueron dos jóvenes matrimonios, integrados por Roger y Linda Scarberry, y por Steve y Mary Mallette, quienes la noche del 15 de noviembre de 1966 conducían en busca de unos amigos por un lugar conocido como la â€úzona TNT”, un reducto solitario para las parejas alejado de miradas indiscretas, que durante la Segunda Guerra Mundial había tenido usos igualmente explosivos pero de naturaleza muy diferente. La TNT, franqueada por un denso bosque y colinas pronunciadas, albergó una fábrica de explosivos así como numerosos depósitos de almacenamiento muchos de ellos subterráneos, quedando abandonada no sin antes haber sido utilizada durante un tiempo por una industria química.

Debía de ser poco más de las 11:30 de la noche cuando al pasar cerca de un viejo generador eléctrico nuestros testigos contemplaron junto a la puerta abierta del viejo edificio dos círculos de un rojo intenso, brillante y definido, unas formas que parecían ojos que acechaban en la oscuridad y que al moverse descubrieron que formaban parte un ser de apariencia humana, de color gris, con piernas, alas plegadas y una altura de casi 2 metros. â€úFueron aquellos dos grandes ojos rojos, como faros de automóvil, lo que nos sobrecogió”, declararían poco después. Menos de un eterno minuto de observación bastó para que Roger pisará a fondo el acelerador de su viejo Chevy y saliera a toda velocidad de la zona por la carretera 62. De inmediato Linda Scarberry se percató que a pesar de la escapada a 160 km/h la criatura les seguía muy de cerca y sin aparente esfuerzo, a unos metros del coche y sin agitar sus enormes alas de más de 3 metros de envergadura. Sólo un fino chirrido, percibido por Mary Mallette y descrito como similar al emitido â€úpor un ratón grande”, acompañaba a aquel extraño ser alado hasta que desapareció a la entrada de Point Pleasant.  Ya en la oficina del sheriff de Mason el suplente Millard Halstead escuchó a los excitados testigos, cuyo convincente relato le hizo desplazarse inmediatamente hasta la zona TNT donde tan sólo puedo detectar una extraña interferencia de radio. Los norteamericanos son como son, y con su particular estilo al día siguiente el sheriff George Jonhson convocó una rueda de prensa en el Palacio de Justicia en la que los cuatro testigos narraron su experiencia a los periodistas, que muy pronto la difundieron por todo el país. Había comenzado la odisea del Mothman. Al día siguiente Point Pleasant y en especial la Zona TNT eran un auténtico hervidero. Numerosos medios de comunicación, curiosos y profesionales del tema, tomaron posiciones a la espera de que aquella especie de hombre murcielago, bautizado inmediatamente como mothman u hombre polilla, regresara para ser fotografiado, filmado, e incluso abatido por los lugareños. Y no se hizo esperar, aunque la nueva observación sólo tuvo por único testigo a Marcella Bennett, quien acompañada de su hija de dos años y un matrimonio amigo, acudieron a casa de otra pareja que vivían en plena zona caliente. Al llegar y descender del coche la Sra. Bennett observó con nitidez como una figura humanoide gris se levantaba del suelo, detrás del vehículo. â€úParecía como si hubiera estado tumbado en el suelo. Se levantó lentamente. Era un ser grande y gris, mayor que un hombre, con unos ojos rojos resplandecientes, terribles”. La impresión que le causó aquel ser que parecía no tener cabeza fue tan grande y el efecto hipnótico de sus ojos ubicados en el torso tan penetrante, que la testigo cayó aturdida al suelo junto con su pequeña, entrando en la casa de la mano de uno de sus acompañantes. Atrincherados en la vivienda sintieron como la criatura merodeó por fuera durante unos minutos, e incluso creyeron observar como miraba a través de las ventanas al interior de la casa.

Como si de un fenómeno de histeria colectiva se tratara, decenas de personas comenzaron a reportar casos en los días siguientes de observaciones del hombre polilla, que eran difundidos por las agencias de noticias de la mano principalmente de la periodista local Mary Hyre. La noche del 21 de noviembre un vecino de la ciudad de Charleston que se identificó como Richard West comunicó a la policía que un ser alado con aspecto humanoide, de unos dos metros de altura y unos tres de envergadura en sus alas, permanecía en lo alto de una vivienda cercana, para ascender verticalmente â€úcomo un helicóptero”. Sus brillantes ojos rojos destacaban una vez más. Ruth Foster también destacó los ojos de la criatura cuando súbitamente la vio la noche del 26 fuera de su casa, en el jardín. Y otro tanto le ocurrió a la joven Connie Carpenter, quién a la noche siguiente y en la ya citada carretera 62 del condado de Mason, contempló como lo que parecía un hombre vestido de gris desplegó una enormes alas y se dirigió contra su coche, desviándose cuando estaba a punto de impactar. â€úAquellos ojos. Eran de un rojo intenso, y una vez fijos en mi, yo no podía apartar los míos de ellos”, aseguró la testigo al investigador John Keel, que por cinco ocasiones se desplazó hasta Virginia Occidental para recoger in situ cientos de testimonios.

El Libro

El resultado fue The Mothman Prophecies, un reportaje novelado publicado en 1975 que incluso fue llevado al cine, y en el que Keel dio cuenta de los casos registrados, junto a otras apariciones de seres extraños como pequeños bigfoot ocurridas en la misma zona, inexplicables interferencias en aparatos de televisión y radio, numerosos reportes de avistamientos de ovnis en bastantes casos coincidentes con los encuentros con el hombre polilla, e incluso la visita de hombres de negro, personajes que con un comportamiento desconcertante llegaron incluso a amenazar a algunos testigos, entre ellos a nuestros primeros protagonistas Mary Mallete y  Linda Scarberry. Al menos según la versión de Keel, que dicho sea de paso, fue duramente criticada por el cocktel misterioso que compuso y divulgó en sus crónicas periodísticas.

Aunque la mayor parte de las observaciones del Mothman se dieron en el último bimestre de 1966 y a lo largo de 1967, los encuentros con otras insólitas criaturas se prologaron hasta 1969, en ocasiones goteando casos durante varios meses y en otras concentrándose hasta medio millar en un solo fin de semana, tal y como reconoció a Keel la periodista Mary Hyre, quién también se vio acosada por los extraños hombres de negro. Hoy en día el Mothman se ha convertido en todo un clásico que lejos de olvidarse, ha revivido gracias a las nuevas tecnologías que han permitido reconstruirlo virtualmente y reproducir sus encuentros difundiéndolos por Internet, donde es posible encontrar miles de referencias a esta criatura. En Point Pleasant la historia sigue viva e incluso el productor de Expediente X Cris Carter, quiso rendirle homenaje en uno de los capítulos de su popular serie. Y todo ello a pesar de que el asunto se quiso zanjar identificando al hombre polilla con una grulla canadiense, un ave que presenta dos manchas rojas rodeando sus ojos y que con sus largas patas y cuello puede alcanzar casi dos metros de altura. Aunque podía encajar, nadie había visto nunca un ave semejante en la zona, y los testigos se negaron a aceptar tal posibilidad.

En cualquier caso, la fiebre del hombre polilla se frenó de forma dramática con el trágico hundimiento el 15 de diciembre de 1967 del Silver Bridge, el puente que cruzaba el río Ohio a la altura de Point Pleasant, causando la muerte a  38 personas. La crudeza del accidente desvió la atención de los ciudadanos, fuerzas de seguridad y medios de comunicación hacia esta tragedia, quién sabe si motivando el final de las apariciones de nuestro protagonista. Un final que para algunos cerraba el extraño ciclo que, algo más de un año antes, se había abierto con la primera observación de aquella criatura humanoide de más de dos metros de altura, grisácea, carente de brazos y cabeza, alas de murciélago y unos ojos rojos de más de 5 centímetros de diámetro, dotados de un poderoso e inolvidable brillo hipnótico.


La película

SINOPSIS

Basada en hechos reales, la película examina una serie de acontecimientos inexplicables a través de los ojos –y la mente– de un hombre. Richard Gere, Laura Linney, Will Patton y Debra Messing interpretan este thriller lleno de suspense que cuenta la historia de un hombre que llega al extremo de investigar las misteriosas circunstancias que rodearon la muerte de su esposa y cómo éstas podrían estar conectadas con los extraños fenómenos que ocurren en un pueblo situado a cuatrocientas millas.

Introducción

MOTHMAN, LA òLTIMA PROFECêA está basada en los acontecimientos relatados en un libro de John Keel de 1975 que lleva el mismo nombre. Se trata de la narración personal de Keel sobre los sucesos que tuvieron lugar en el pequeño pueblo de Point Pleasant, Virginia Occidental, durante trece meses, los cuales culminaron en una tragedia que llenó las páginas de los periódicos del mundo en diciembre de 1967.


Contada en esta ocasión como una historia contemporánea, la película presenta a Richard Gere como John Klein, un reportero del Washington Post que, después de una terrible pérdida en su vida, queda atrapado en unos extraordinarios hechos que afectan las vidas de la gente corriente. Tal y como la describe Gere, "la historia que contamos es realmente psicológica. Mi personaje ha sufrido una desaparición horrible al perder a su esposa al inicio de la película. Todo lo que le sucede lo relaciona con este hecho, con este trauma. Por tanto, proyectamos nuestro propio universo en todo momento. Creo que en la película intentamos mostrar como cada uno ve cosas distintas. No es como si cada dibujo fuera exactamente igual. Algunas personas oyen algo, otras ven algo, y unas otras sienten algo. Se trata de la interpretación de la realidad basada en la creación mental de cada uno, en la creación emocional de cada uno".


Fue el aspecto psicológico de la historia lo que atrajo al director Mark Pellington al proyecto. "Richard Hatem, el guionista original, había hecho un gran trabajo al coger el libro y convertirlo en una película", dice Pellington. "Al crear el personaje de John Klein como el polo alrededor del cual giran todos los acontecimientos, había configurado un héroe para la historia." Sobre su enfoque personal en la película, Pellington dice que "es un territorio difícil y, de hecho, es muy fácil caer en el melodrama o en la absurdidad. Porque tiene algo de increíble, así que debes ir un poco más allá, hasta un punto en que todo es emocionalmente misterioso, enigmático, surreal por naturaleza y metafísico; de esta manera, el material puede funcionar. De otro modo, resultaría ridículo."


A pesar de que la película retiene los detalles básicos del libro, el productor ejecutivo Richard S. Wright le permitió a Pellington la posibilidad de mantener el enfoque de la película en la historia humana y conservar su impacto psicológico. "La gente ha intentado hacer una película del Mothman como mínimo desde que se publicó el libro de Keel", dice Wright. "Muchos escritores lo han intentado pero es un tema muy difícil de tratar correctamente. Mark Pellington es quien ha conseguido imaginarse el modo de hacerlo." Wright continúa explicando que "ya desde un principio decidimos alejarnos de los ovnis y conservar acontecimientos que considerábamos más interesantes, como la gente que ve luces extrañas en el cielo o las llamadas telefónicas de raras voces. Para nosotros, el Mothman es una presencia. No buscamos la versión de látex de La mujer y el monstruo". La nuestra es mucho menos obvia pero más aterradora." Tal y como Pellington dijo al equipo cuando se inició la producción, "nunca diremos ‘criatura’ o ‘monstruo’. Nunca se ha manifestado de la misma forma a todas las personas, a pesar de que existen similitudes."


El productor y presidente de Lakeshore Entertainment, Gary Lucchesi, ha convivido con el proyecto durante mucho tiempo. Es la credibilidad de la historia lo que le convenció de que debía hacerla. "Soy un productor que cree que ‘si me puede pasar a mí, me interesa’", y continúa diciendo que "si piensas en las grandes películas de Hitchcock – si piensas en La ventana indiscreta y en Jimmy Stewart sentado con la pierna rota y siendo testigo de un crimen – te dices a ti mismo, ‘bien, Áesto me podría pasar a mí!’ y esto es lo que encuentro atractivo. Es muy hitchcockiana. Es lo que pasa cuando gente razonablemente cuerda se topa con cosas increíbles. En este caso lo increíble es el presagio del destino, el presagio de la muerte."


Al haber trabajado en anteriores películas con Gere, para el productor Lucchesi la decisión sobre el casting fue fácil. Explica que "Richard es una estrella cinematográfica muy popular, un hombre que atrae fácilmente al gran público. Era perfecto para interpretar a John Klein". De la elección de Gere para el papel de John Klein, Mark Pellington dice que "es una gran elección, porque debe ser alguien al que estés dispuesto a creer cuando la gente le cuenta que ha visto esas cosas o cuando él mismo dice ‘he recibido una llamada de una entidad de nombre Indrid Cold’, de lo contrario te reirías". Pellington continúa diciendo que "por lo que atañe al reparto, lo más importante es encontrar aquella persona perfecta para cada papel y nuestra misión consistía exactamente en hacer esto. El material dibujó a las personas. No fue difícil conseguir un reparto de este calibre y todo gracias al material".


Cuando se habla sobre el material, Lucchesi observa que "en este guión hemos intentado crear un carácter para John Klein, quien es un completo pragmatista. Es redactor del Washington Post. Toda su vida ha versado sobre el descubrimiento de hechos. Y ahora descubre algo que no puede abarcar, que su parte más lógica sabe que no puede existir, por lo que se plantea si puede creer en algo sobrenatural o metafísico o más espiritual."


Mark Pellington describe a John Klein como "un hombre claramente racional, pero al que un trauma emocional convierte en vulnerable, intuitivo. Es un fiel pensador, sensible a los hechos que le rodean".


Gere amplia esta idea diciendo que "creo que existe un resquicio al que se aproxima este personaje cuando es incapaz de encontrar más pruebas". Gere observa que su personaje finalmente se da cuenta de algo que se encuentra a un nivel muy humano. "Creo que se trata de un proceso en el que varias personas situadas en distintos niveles se ayudan a sí mismas y a las otras, algo muy valioso en este trabajo. Son personas que en condiciones normales nunca habrían entrado en contacto con las otras personas. Por ejemplo, mi personaje y el de Gordon, interpretado por Will Patton, nunca hubiesen tenido ningún tipo de relación si no fuera por lo que sucede en esta historia y creo que de todo esto se desprende una extraña amistad". El personaje de Gere y el de Laura Linney, Connie, también forman una inusual pareja.


Al hablar sobre Laura Linney, quien interpreta el papel de Connie Parker, Gere dice que "me encantó trabajar con ella en Las dos caras de la verdad y pensé que era perfecta para el papel. Es muy creíble como habitante de un pueblo pequeño – es lista y abierta. Fácilmente sería alguien del pueblo en quien la gente confiaría. Laura ha vivido mucho, como todos nosotros, y esto aparece en su trabajo".


El director también pensó que Connie debía ser fuente de fuerza para otros personajes de la historia. Tal y como describe al personaje, "éste debía ser fuerte, era necesario que se notara que tenía carácter. Era necesario que se viera que tiene un gran sentido de la honestidad y mucha fuerza y que sería capaz de levantarte si fuera necesario, pero lo más importante es que uno debe tener la sensación de que sabe escuchar y de que es muy honrada". Hacer que Linney interpretara este papel fue una elección muy fácil para el director. "Cinco minutos después de que hubiese empezado nuestra reunión, ya había visto en ella tal variedad de emociones que supe de inmediato que me encontraba sentado delante de Connie", explica Pellington. "Creo que Laura llena el vacío entre ser una actriz de carácter y ser una primera actriz como Meryl Streep o Jessica Lange, que también son muy atractivas, pero cuya belleza nunca domina su credibilidad."


Linney se entusiasmó con este proyecto, no sólo por la oportunidad de interpretar un papel muy distinto – el de oficial de policía de un pequeño pueblo – sino también por el reto que representaba la historia en sí misma. La actriz explica que "es un proyecto de mucho riesgo, que es una de las razones por las que deseaba tanto hacerlo, además de trabajar de nuevo con Richard, que es la principal razón por la que lo hice, y también por los productores, a quienes conozco desde hace mucho tiempo. Creo que Mark Pellington es tan interesante visualmente que aportará algo un poco inusual en nuestro tiempo".


Bueno hasta aquí os Cuento, Espero que lo Comentemos  ;D
El hombre polilla? no lei el articulo es demasiado largo y no me interesa mucho, pero si vi un documental sobre el; me parece demasiado ficticio algo así como los hombres lobo o vampiros.

El hombre polilla? no lei el articulo es demasiado largo y no me interesa mucho, pero si vi un documental sobre el; me parece demasiado ficticio algo así como los hombres lobo o vampiros.


Ya lo creo, pero sigue siendo Misterios como tantas cosas en la Vida
Em... no me voy a leer ese tocho, porque ya tengo el quijote...


Alguien puede resumirlo?

Em... no me voy a leer ese tocho, porque ya tengo el quijote...


Alguien puede resumirlo?


No te engañes, el Quijote es más corto


Lo siento pero no puedo hacer ningún resumen ya que sea del tema que sea, es LARGO..

¡Soy el fantasma de Habtium! Me dedico a reemplazar aquellas cuentas que han sido eliminadas. 👻
El resumen, tampoco leí el articulo xD pero lo que recuerdo del documental es esto.

El hobre polilla es una criatura con forma humanoide de piel grisácea y unos grandes ojos rojos parecidos a los de un insecto, fue visto en varias ocasiones en las cercanías de un bosque donde se encuentra una antigua fabrica de explosivos, se cree que es un extraterrestre o un experimento genético de los Estados Unidos y escapó de algún laboratorio.